Trasfondo[]
Nacida en Argus. Era apenas una niña cuando Sargeras acabó con su mundo, apenas recuerda nada de su planeta natal, sus mejores recuerdos comienzan con su llegada a Draenor. En ese nuevo mundo, se hizo muy amiga de una joven orca llamada Goggra, la cual le enseñó a hablar orco y el arte de la alquimia. Pero su apaciguada vida en Draenor se vio truncada de nuevo por la Legión Ardiente. Los orcos arremetieron contra ellos dejando a los draenei casi extintos. Junto a su familia logró escapar del genocidio en la nave Exodar. Fue en isla Bruma Azur donde empezó su instrucción como sacerdotisa. Excelente alumna, sus progresos no pasaron desapercibidos por sus maestros y fue la mismísima Suma Sacerdotisa Ishanah la que le convocó para que siguiese su aprendizaje en la cátedra de Shattrath. Durante su aprendizaje, colaboraba en el orfanato de la ciudad y ayudaba a los refugiados.
Tras finalizar sus estudios comenzó un peregrinaje en solitario, pasando largas o cortas estancias en cualquier ciudad que necesitase ayuda.
Apariencia[]
Ojos grandes, brillantes y muy expresivos. Semblante afable, larga melena color platino que contrasta con su piel oscura y azulada. Figura atlética, suele vestir con togas holgadas y cuando sale de viaje le gusta ir con ropa cómoda y una capa con capucha.
Carácter[]
Desprende una gran energía positiva, siempre correcta y educada, regala sonrisas incluso al enano más grosero y gruñón de todo Azeroth. Un poco tímida hasta que coge confianza, no suele entrar en polémicas ni en temas de conversación que puedan incomodar. Es muy observadora y curiosa. Amante de la naturaleza y las artes curativas, no dudará ni un segundo en socorrer a un ser en apuros independientemente de la raza que sea. Estudiosa de la alquimia, siempre buscando fórmulas para ayudar a los demás.